Despertamos un buen día
con una pandemia
encima,
¿complot o estrategia
de la muerte?
¿te mueres porque te
toca?
O solo por mala suerte.
Se van los “malos”,
también los “buenos”
y uno que otro conocido:
ricos, pobres, guapos, feos,
la calaca viene por
todos,
sin importar parecidos
¡Ay señor Dios mío!
Gritó Pepón al correr,
trataba de escapar una
noche
sabiendo que no iba a
poder
la muerte dijo: ¡Ven
Pepito!
al temeroso escritor
—¡No corras!, ¿qué
tanto es tantito?
si ya no tienes un solo
lector—
Con la pluma en la
garganta
como una traqueostomía
murió el director de
los “Bernales”,
la noche se le hizo ese
día.
Estampida de escritores
sin disimulo corrieron
Carolina murió
pisoteada
y ni siquiera la
vieron.
No respetó género o
edades,
tampoco una buena prosa.
La huesuda cargó con
todos;
huesos chicos, huesos
largos
cupieron en la carroza.
¿fue por covid,
infartos o diarrea?
¿o por alguna causa
vana?
Todos los Bernales
murieron,
ya no hay risas en su
cama.
Adiós queridos Bernales,
la gente no los
lamenta.
Saldrán a escribir en
un año;
se bañan, se ponen
guapos
y limpien bien su
osamenta.
Jorge Malpica Jiménez
Imagen: Alec Dempster